Las opciones

Básicamente, todos los intentos de explicar la Estrella de Belén entran en uno de tres categorías.

(i) La Estrella es un mito.

Algunos autores, preocupados por las inconsistencias entre los evangelios de Lucas y de Mateo y por la falta de las palabras "con ello se cumplió lo que dijo el Señor por el profeta", han sugerido que la Estrella de Belén nunca existió. Esta gente apunta a que Jesús nació en una época cuando ningún rey, ningún emperador, ni nació ni falleció sin que se viera algún tipo de fenómeno celestial o terrenal (un cometa, el nacimiento de una cabra con cinco patas, etc.) para dar importancia al suceso. Puesto que Jesús era el rey más grande de todos, la manifestación que señalizara su nacimiento tenía que ser especialmente importante para convencer a los no creyentes de su importancia. Para dar credibilidad a Jesús entre los paganos, Mateo simplemente añadió a su evangelio un portento celestial especialmente espectacular.

(ii) La Estrella fue un suceso astronómico

Aunque la descripción de la Estrella ha sido modificada durante el pasar de los años, en parte por razones "artísticas" y en parte porque el evangelio de Mateo se escribió al menos tres y posiblemente cuatro generaciones después de verse la Estrella de Belén, Mateo describió un suceso astronómico real. Puesto que hay muchas explicaciones astronómicas plausibles de la Estrella de Belén, es solo una cuestión de tiempo y de lógica para dilucidar cuál es la correcta. Esta conclusión está fuertemente apoyada por el hecho que muchos de los sucesos descritos en la Biblia realmente tuvieron ligar y han sido confirmados por los historiadores y los arqueólogos. Además, buena parte del Nuevo Testamento se escribió como un texto más o menos histórico, aunque con bastantes añadidos y ediciones, que pretendía relatar los hechos (por ejemplo, la aparición de la Estrella de Belén) tal y como sucedían.

(iii) La Estrella fue un suceso milagroso

La Estrella fue una manifestación de la mano de Dios. Nadie tiene que justificar sus acciones y su a Él le plazca hacer brillar una estrella dónde no había ninguna antes, no es para los científicos cuestionarlo. Varios de los aspectos de la Estrella tal como se describe en Mateo son impropios de un fenómeno celestial natural: las estrellas no se mueven delante de los viajeros para guiarles y no se paran para señalarles la llegada a su destino. Si tomamos literalmente la descripción de Mateo y de Santiago, no existe ninguna posible explicación científica.