Analisis
M. Kidger 2014-05-25
Tenemos observaciones en 2008-09 entre 110 días antes del perihelio y 38 días
después y, en 2014, de 60 días antes del perihelio a 18 días después.
Prácticamente no existe solapamiento entre las observaciones del retorno de 2009
y las de 2014, al menos hasta ahora. Parece que las observaciones muestran que
hay poca actividad hasta unos 15 días antes del perihelio, con un incremento
rápido desde una semana antes a dos semanas después del perihelio.
Definitivamente la actividad es muy asimétrica en torno al perihelio.
No parece que hay actividad significativa antes del perihelio a más de 1.2UA del
sol - en eso el cometa es similar al 27P/Crommelin. A finales del siglo 19,
cuando se dejó la material que la Tierra encontró el sábado por la mañana, la
distancia del perihelio fue de 0.87UA, sensiblemente menor que las 0.97UA
actuales. Esa distancia se irá incrementando ligeramente en las próximas décadas
hasta alcanzar 1.07UA en 2086.
Un indicio del efecto relativo de la Tierra y Júpiter en la órbita es el hecho
que aunque el cometa pasará a sólo 0.0555UA de la Tierra durante la madrugada
del día 29 (miércoles de esta semana), la distancia del perihelio se reducirá en
la mínima cantidad de 0.002UA como resultado del encuentro. El 18 de febrero de
2012 el cometa pasó a una distancia más de diez veces mayor de Júpiter (0.59UA)
y el perihelio se incremento de 0.914UA a 0.969UA.
Si seguimos la pauta de 2009, esperaría ver un declive rápido empezar en la
próxima semana o diez días. Sólo hay tres observaciones post-perihelio en 2009,
por tanto un seguimiento intensivo en esas próximas semanas es especialmente
interesante para definir el declive de la actividad.
Coma interna muy concentrada que nunca se desarrolla. Incluso ahora, con
actividad, el cometa es casi puntual, sin coma extendida que se puede apreciar
en el perfil radial.